Cap. 36 Automatic Dreams

Capítulo 36: Nochebuena

Narra Bettina:

Por la mañana me levante un poco tarde, fui a desayunar, y me encontré con mis hermanos en la cocina, que al parecer estaban hablando de los nombres de los gemelitos.

Bettina: Hey, buenos días hermanitos, de que hablan –Dije con una enorme sonrisa-

Kayla: de lo de siempre, de mis antojos extraños, de mis vómitos, de los gemelos –Dijo feliz-

Jared: Jamás pensé que vivir con una embarazada seria tan extraño –Dijo riéndose-

Bettina: y bien, ¿que desayunaron? ¡Muero de hambre!

Jared: Yo desayuné huevos fritos y Kayla un sándwich de salsa de tomate con azúcar –Dijo con cara de asco, yo tan solo me reí de su expresión-

Kayla: Ya ves, lo que me hacen comer mis hijitos –Dijo sonriendo mientras tocaba su pancita-

Comenzamos a reír los tres, me senté junto a ellos en el mini comedor de la cocina para desayunar, me preparé un par de huevos fritos y un poco de fruta.

Bettina: No se les olvide que a las ocho de la noche debemos estar en casa de los Kaulitz

Jared: veo que te entusiasma mucho ir a su casa para navidad, jamás te había visto tan Feliz un 24 de Diciembre en la mañana

Bettina: Porque es la primera navidad que pasaré estando enamorada de alguien, y sin pensar en ya sabes que –Dije sonriendo-

Terminé de desayunar, subimos a nuestras habitaciones para ducharnos y arreglarnos, ya que iríamos a comprar los regalos navideños. 
Este sería el primer año en el que compraríamos regalos navideños para alguien, y esa idea nos entusiasmaba mucho. 


Fuimos a un almacén donde vendían preciosos adornos y cosas navideñas. Compramos los suficientes para las personas que irían, seriamos Bill, Tom, Simone, Gordon, Georg, Gustav, Andreas, Kayla, los gemelitos, Jared y yo. 
Regresamos a casa alrededor de las siete de la noche. Llegamos apresurados, ya que nos debíamos arreglar para esta noche. 


Me di una ducha rápida, sequé mi cabello y lo planché para que quedara lacio. No suelo alaciarme mucho el cabello, ya que rizado natural me encanta.
 Me puse maquillaje oscuro. Sinceramente, intenté maquillarme tal como se maquilla Bill, pero no me salió exactamente igual, aunque un poco parecido. 
Ya que mi cabello y mi maquillaje estaban listos, me puse el precioso vestido que compré un par de días atrás. Era un vestido divino, de color rojo sin tirantes y entallado que me llegaba un poco arriba de la rodilla. Tenía un cinturón rojo más oscuro en la cintura que hacia que mis curvas se marcaran más.
 Me puse unas zapatillas negras con brillantes y me puse mi abrigo negro que quedaba perfecto con el vestido. Cuando estuve lista, fui hacia la habitación de Kayla para ver si no necesitaba algo, golpeé la puerta un par de veces y enseguida mi hermanita peque vino a abrirme.

Kayla: ¡Wow Bettina te ves guapísima! –Dijo sonriendo-

Bettina: No creo que más que tu nena, te ves divina –Realmente Kayla si se veía preciosa, tenía un vestido dorado sin tirantes, tenia una falda esponjadita y una cinta blanca en la cintura. Sus zapatillas eran doradas y su abrigo blanco, y al contrario de mi, ella se había rizado un poco el cabello-

Kayla: Gracias hermanita, ayúdame a maquillarme por favor que no tengo idea de cómo hacerlo.

Comencé a maquillarla, le puse sombra de ojos dorada con delineado negro, un brillo labial de color rosa ¡Se veía hermosa! Justo cuando terminé, Jared tocó la puerta, le dijimos que entrara y así fue, ¡Se veía guapísimo! Traía un traje negro con una camisa rosa y una corbata color vino.

Jared: Mis pequeñuelas si que son guapas ¿A caso se intercambiaron el cabello? –Dijo subiendo una ceja y Kayla y yo tan solo comenzamos a reír-

Bettina: ¡Tu igual eres guapísimo!, es una lástima que no tengas novia –Dije mirándolo-

Jared: Ya vez, soy igual que tu novio, espero a mi alma gemela, solo que yo no me visto como gay mientras la espero jajaja –En ese aspecto de buscar al alma gemela, Bill y Jared son muy parecidos, y por eso se llevan tan bien, cosa que me agrada demasiado-

Bettina: No seas pesado, no se viste como gay, simplemente tiene su estilo único –Dije sonriendo y orgullosa de mi Bill, mientras Kayla tan solo se reía-

Nos fuimos hacia la sala, nos tomamos unas fotos a un lado del árbol de navidad, después llegó Flor, y se tomó unas cuantas fotos con nosotros. 
Salimos al patio, hacia muchísimo frío, estaba nevando un poco, y llevar un vestido corto cuando cae nieve no era buena idea, pero valía un poco la pena. 
Nos subimos al nuevo auto de Kayla, aunque Jared lo tuvo que conducir, ya que había hielo en las calles y era peligroso que Kay en su estado condujera. 
Después de diez minutos de camino, llegamos a la casa de los Kaulitz, tocamos el timbre y Tom nos recibió con una enorme sonrisa.

Kayla: Tommy –Se lanzó a abrazarlo en cuanto lo vio-

Tom: ¡Wow! ¡Todos se ven muy bien! Pasen –Nos dijo con una sonrisa, a Kay y a mi nos saludó con un beso en la mejilla, a Flor con uno en la mano, y a Jared simplemente le estrechó la mano-
Entramos a la casa, estaba muy bien decorada con adornos navideños y con un enorme árbol, colocamos debajo de éste todos los regalos que compramos esta tarde, junto los que ya estaban debajo.

Bettina: ¿Tom donde esta Bill?

Tom: Esta en la habitación, si quieres sube a buscarlo –Me dijo con una sonrisa-

Fuimos a la cocina a saludar a Simone; mis hermanos y Flor se quedaron ahí con ella y Tom, mientras yo me fui hacia la habitación de Bill. Cuando estuve afuera, golpeé la puerta un par de veces.

Bill: J*oder Tom, ahora que quieres –Gritó desde adentro, se escuchó que sus pasos se acercaban hacia la puerta, mientras ésta se abría, y se ahí salió Bill-

Bettina: -Me lancé hacia él dándole un profundo y apasionado beso- vaya, ahora me llamo Tom –Le dije con una sonrisa-

Bill: Perdóname Betti, pero es que estoy un poco molesto con él –Me dijo con un puchero-

Bettina: ¡No es posible que estés molesto con tu gemelo en Navidad!

Bill: Es que nos pusimos a hacer idioteces en la cocina mientras hacíamos las galletas, y la ensuciamos horrible, y el me echó toda la culpa, aunque mamá nos regaño a ambos –se rió-

Bettina: Son tontos los dos–Reí- y ¿que estabas haciendo aquí encerrado?

Bill: Estaba apunto de peinarme por segunda vez en el día mi cresta, ya que la primera que me peiné terminó embarrada de huevo –Dijo riéndose-

Bettina: Anda a peinarte, quiero ver como lo haces –Dije como niña chiquita-
Mientras Bill se peinaba, no dejaba de decirme cosas como “Que hermosa que eres” o “Que novia tan bonita tengo”. Ese tipo de cumplidos me gustaban muchísimo, ya que tengo la certeza de que Bill me los dice desde el corazón.

Bill: Creo que no te he dicho que me encanta como te has maquillado, se parece tanto a mi maquillaje –Dijo mirándome de reojo, ya que se estaba viendo en el espejo-

Bettina: jaja si, de hecho me lo hice pensando en ti –Dije acercándome a él para besarlo-
Estuvimos conversando de muchas cosas, Bill me comentó que el dueto lo grabaríamos a finales de Enero, no sería un dueto en sí, mas bien yo lo apoyaría con el sonido de fondo y cantaría en algunas partes, me comentó que la canción se llama “Geisterfahrer”. 


Terminó de arreglarse, se veía tan guapo como siempre, se puso un pantalón azul oscuro, una camisa blanca (raro en el, ya que nunca usa camisas) y unos zapatos negros, además de su preciosa cresta, solo que no se puso maquillaje, ya que me dijo que solo lo usa para ocasiones de la banda. 
Nos tomamos de la mano y bajamos hasta la cocina, donde nos esperaban los demás.

Narra Kayla:

¡Ya cumplí tres meses de embarazo! Me siento tan emocionada con eso. Tan solo faltan seis meses para poder tener a mis pequeños entre mis brazos. 


Esta noche celebraríamos la navidad en casa de los Kaulitz, es algo increíble, ya que siempre las navidades las pasábamos mis hermanos y yo aburridos en casa viendo la televisión. 


Fuimos a comprar regalos para todos, y después fuimos a casa a arreglarnos. Finalmente nos fuimos a la casa Kaulitz, ¡Madre mia! Jamás pensé que su casa fuera tan linda y acogedora. 
Por fuera era de color blanco con detalles en café chocolate, bastante grande y preciosa. Y por dentro más aún linda, las paredes blancas con sofás blancos, ¡parecía que había nevado allí dentro!. 


Tocamos el timbre, y el que abrió fue Tom, me sentí emocionada al verlo, ya que no lo había visto desde hacia cuatro días, porque andaba un poco apresurado con los regalos y la decoración navideña. 
Me lancé a abrazarlo, él me saludo con un beso en la mejilla, y a mis hermanos y a Flor ni siquiera me di cuenta como los saludó. Entramos a la casa y nos fuimos directos a la cocina para ayudar a Simone con la cena. 


Pocos minutos después de que llegáramos, tocaron el timbre, acompañé a Tom hacia la puerta, y eran Georg y su novia me parece, Gustav y Andreas, nos saludaron a Tom y a mi, y los invitamos a pasar. Estuvimos en la sala conversando un largo rato, hasta que llegaron Bill y Bettina, nos saludaron a todos y se quedaron a conversar un rato más.

Georg: Bueno, Bettina y Kayla, ustedes no la conocen, ella es Sabina, mi novia desde hace un año    –Dijo sonriendo-

Sabina: Hola chicas –Dijo con una sonrisa, parecía ser una chica muy agradable, su cabello es de tono rojizo, y su piel es blanca, iba vestida con un vestido azul oscuro, unas zapatillas del mismo color, y un abrigo negro-

No se cuanto tiempo estuvimos conversando, al parecer Bettina y Sabina se llevaban muy bien, ya que según entendí, Sabina tiene 19 años, y al igual que Betti, esta estudiando para ser doctora.

Simone: Hey chicos, ya son las 11.45 de la noche, comencemos con el brindis ¿vale? Vengan al comedor –Nos dijo desde la cocina ¿Tanto tiempo estuvimos conversando? Al parecer si-
Nos fuimos hacia la mesa, cada quien tomó una copa que traía un líquido, al parecer era champagne, yo no pude tomar eso porque me haría daño, así que tomé un poco de jugo de manzana para brindar junto con los demás.