Georg y Gustav entretenían al público de diferentes maneras
increíbles. Gustav hacía su ‘ola’ con las manos, mientras Georg tocaba algunas
notas con el bajo y teclado haciendo sonidos asombrosos.
Lamentablemente, después del espectáculo que había montado
Tom minutos antes, mucha gente se había retirado del concierto, aunque eso no
les importaba en absoluto a los chicos.
Kayla lloraba abrazando a Jared. Ni siquiera sabía por qué.
Lo que hizo Tom le había parecido dulce y humillante a la vez; y ahora se
sentía culpable de que cientos de personas hayan decido irse del espectáculo
por razones diversas, aunque la principal había sido probablemente enojo hacia
la decisión de Tom o intolerancia hacia la noticia.
— ¿Qué pensabas, que todos iban a aplaudirte con sonrisas y
besitos? ¡No, Tom! — Tom se encontraba derrumbado sobre un sofá sin saber qué
hacer, mientras que un furioso David Jost estaba de pie frente a él, con el
rostro rojo fuego y sacando humo por las orejas enfurecido. No literalmente.
—La verdad es que si. —Se limitó a responder. David se
aguantaba con éxito las ganas de golpearlo, inhalando y exhalando…
— ¿Cómo piensas arreglarlo ahora? —Gritó el manager. Tom
colocó las manos sobre su cabeza, comenzando a pensar.
—Cancelemos el concierto y se acabó.
— ¡No es tan fácil!
—Espero que te sientas más tranquilo ahora. —Interrumpió Bill
la exaltante conversación/regaño apareciendo repentinamente en el camerino.
—Ni yo mismo sé que pensar ahora… —Murmuró. Bill se hincó
frente a Tom, observándolo sin decir nada instándolo a continuar. —Sólo quería
que Kayla se sintiera mejor, no quería hacerla llorar…
—La conozco, y sé que estará bien. Tan sólo lloró por la
frustración o nervios, supongo. —Tragó saliva. Todos sabían que el carácter de
Kayla es simplemente ‘especial’, y ahora era el momento idóneo para dudar sobre
la reacción de la joven. —Debemos volver al escenario.
— ¿Crees que sea buena idea?
— ¡Excelente idea! Ahora mueve tu horrible cuerpo del sofá y
vayan a tocar… —Interrumpió David, Bill se aguantó las ganas de reír.
— ¿Horrible? —Cuestionó Tom poniéndose de pie, Bill hizo lo
mismo. —Ahora mismo me siento realmente decepcionado de los fans.
— ¿Sabes que se fue casi la mitad de la audiencia después de
todo el escándalo? —Acusó Bill levantando la voz, impregnando su mirada de desesperación
al notar las débiles reacciones de su hermano.
—Por eso lo digo, aunque no pensé que hubieran sido tantos,
pero…
—Los que se quedaron es porque de verdad les importamos.
—Tú realmente quieres continuar con esto. —Aseguró Tom, Bill
rodó los ojos.
—Vuelvan al escenario, chicos. —Ordenó David
interrumpiéndolos.
—Sólo lo haré por ti Bill. —Sentenció Tom.
Juntos regresaron hacia el escenario, y se sorprendieron al
notar que los pocos fans restantes estaban completamente fascinados con las maravillas
que hacían Georg y Gustav.
Georg seguía tocando sus respectivos instrumentos, pero había
añadido su voz, comenzando a cantas algunas frases de distintas canciones de la
banda, mientras que Gustav lo acompañaba con la batería.
Entre el público se encontraban más periodistas y paparazzis
de los que habían antes de que los gemelos se fueran.
Sintiéndose aliviado, Georg caminó rápido hacia Bill y le
devolvió su micrófono; le gustaba cantar, pero se sentía nervioso de hacerlo
frente a tantas personas, aunque éstas le hayan ofrecido el gran apoyo mientras
lo hacía.
[ Kayla ]
Sentía todas las miradas sobre mí y no entendía nada.
Dejé de llorar en el pecho de mi hermano y Bettina me abrazó
intentando que me tranquilizara aún más, aunque ni yo misma sabía qué hacer
exac
tamente.
En cuanto estuve completamente decidida a dirigirme al
backstage a buscar a los Kaulitz, ellos salieron al escenario de nuevo. Ambos
se veían temerosos, Bill avergonzado y Tom tenía aspecto de niño pequeño que
acaba de ser regañado por su padre.
Media hora
más tarde, el concierto terminó, y en ningún momento Tom dejó de observarme
pidiéndome perdón con la mirada.
Mientras la gente comenzaba a abandonar el recinto, varias
personas de seguridad nos escoltaron hacia un amplio y oscuro lugar vacío a un
lado del escenario. Allí se encontraban todos los autos del equipo; se prohibía
el acceso a las demás personas que no fueran del staff, o nosotros.
— ¿Dónde está Tom? —Pregunté alterada. Era la primera frase
completa que mi boca lograba formular después de aquel ‘show’ que formó mi
novio anteriormente.
—En un momento lo verás. —Se limitó a responder Bettina,
interrumpiendo su conversación con Serch, quien amablemente empujaba la silla
de ruedas de mi hermana.
Negué con la cabeza comenzando a molestarme. Todos estaban
percatados de cómo me sentía yo, y sin embargo, todos me ignoraban; y no tenía
a mis hijos cerca para consolarme. Ellos estaban en casa, siendo cuidados por
nuestra nana Flor.
Sin pensármelo dos veces, salí corriendo disparada de regreso
hacia el lugar. Escuché cómo Jared y Vinz gritaban mi nombre mientras yo me
encarreraba, y detrás de mí escuché un par de pies perseguirme, que seguramente
serían los de los guardaespaldas.
Pocas personas quedaban en el lugar, algunas tomaban
fotografías del escenario y la batería de Gustav. Noté que varios paparazzis y fans
me fotografiaron a mí siendo perseguida por los sujetos vestidos de negro que
deberían cuidarme.
Subí rápidamente por unos cuantos escalones un tanto altos
hasta lograr subir al escenario. Recorrí toda la superficie lisa desde un
extremo al otro; corrí lo más rápido que pude por las escaleras que me llevaban
hacia el punto más alto del escenario, allí mismo donde Bill solía subirse para
poder apreciar a toda la gente desde el máximo esplendor.
Me detuve unos segundos, recuperando un poco el aliento y reparando
en que eran bastantes personas las que me miraban y fotografiaban.
Saludé cínicamente, sabiendo de antemano que ellos sabían
perfectamente quien era yo, y seguramente a algunos les desagradaba mi sola
existencia.
“Para haber dado a luz hace pocos meses, aún puedo correr
perfectamente”. Pensé y sonreí orgullosa.
Bajé de nuevo por las escaleras, aliviada de que los hombres
que me perseguían aún no me alcanzaban.
Me dirigí hacia la parte trasera, desapareciendo de la vista
de los flashes de las cámaras.
Me detuve de repente, chocando con el gran cuerpo de un
hombre enorme, seguramente otro más de seguridad. Caí al suelo golpeándome en
la cabeza; lo miré de lleno y él me devolvió una mirada fría.
—No puedes pasar. —Gruñó con voz fría. Le fruncí el ceño, ¿No
piensa ayudarme a levantarme de la caída que él me provocó?
—Soy Kayla Murett, necesito hablar con Tom. —Le dije con la
voz fuerte. Él dejó su expresión impasible.
—Identificación. —Murmuró.
Suspiré amargamente. Ahora sí que necesitaba hacerme notar.
Sin dejar de fruncir el ceño, me levanté del suelo y,
furiosa, estiré la mano hacia arriba, lo suficiente hasta alcanzar el rostro
del tipo y soltarle una buena y ruidosa bofetada.
— ¡TOM! —Grité casi desgarrándome la garganta y dejando sin
aire a mis pulmones. — ¡TOM, VEN ACÁ!
— ¡Seguridad! —Gritó el musculoso tipo de cabellera corta que
abofeteé.
— ¡TOM! —Repetí.
Y como si se tratara de magia, aparecieron de diferentes
sitios que no noté, más hombres enormes vestidos de negro, y entre todos me
sostuvieron sin cuidado de los brazos, haciéndome jadear.
— ¡NECESITO VER A TOM, JODER! —Grité de nuevo.
—No eres la primera en decir eso. —Resopló el tipo de la
bofetada.
— ¡Bill, TOM! —Continué gritando. Me revolví entre el agarre
de los tipos.
Ellos comenzaron a arrastrarme hacia la salida, y yo grité
más y más fuerte.
—Déjenla sola chicos, es la novia de mi hermano. —Escuché la
extrañamente ronca voz de Bill. Los hombres de negro me soltaron de inmediato,
dejándome caer al suelo de nuevo.
Gateé por el piso hasta llegar junto a mi dulce cuñado y me
abracé de sus piernas. Él me sonrió y me ayudó a ponerme de pie. Lo abracé
estrechándolo fuerte, ahora mismo me sentía demasiado vulnerable después de
haber sido agredida por aquellos tipos, aunque yo también haya agredido a uno…
Me dieron ganas de llorar otra vez.
—Hey, no deberías estar aquí. —Dijo con voz dulce sin dejar
de abrazarme. ¿Qué rayos con su voz ronca?
—Bill…
—Es normal que la voz esté así después del concierto. —Me
guiñó un ojo, respondiendo mi pregunta no formulada.
—Tom… —Mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.
—Te llevaré con él…
Pero en vdd creyó que tirando esa INESPERADA " BOMBA " ( bueno sorpresiva para sus TOMITAS ) interrumpiendo el concierto TODO SEGUIRIA NORMALMENTE??? La reacción de Kayla ( llanto y rabia ) eran de esperarse!!! Pero la de las fans yendose del recinto NOOOO!!! -_- y el impensado comportamiento de su novia con esa loca carrera MENOS!!! WTF??? Continuaran juntos o qué??? Mil gracias por avisar SIEMPRE!! :) ♥
ResponderEliminarHolaaa! cuanto tiempo :) la verdad es que estando enamorada es muy fácil escribir desde el corazón. Acabo de leer tu capi, y...tom esta loco, y no se porque kayla actúa asi! y ..lo has terminado dejandome intrigada! jolin! XD
ResponderEliminarespero el siguiente capi, cuidate mucho. Adios!